Construido con vigas de abeto Douglas hechas de árboles seleccionados de la propiedad de Coulson, este estudio de postes y vigas no deja de impresionar. Los voladizos de 42 ″ salen de 900 pies cuadrados de techo de césped, a lo largo de cadenas de pluma de troncos reciclados, que alimentan por goteo bambú en macetas en la entrada.

Una escalera de hierro curvada recuperada proporciona un medio de acceso al techo verde, así como un toque orgánico al edificio.

La sala de estar de techo alto, con sus vigas de abeto Douglas y ventanas del piso al techo, lo deja conectado con la naturaleza y con una sensación de calidez y comodidad.